El pago es ella
Cuando los tratos sucios de su padre ponen a Caroline Hargrove en contacto con el jefe de la mafia Dominick Lugiano, se ve arrastrada a un mundo nuevo y peligroso incluso cuando se está enamorando.
Ella es la garantía
La secuestré porque necesitaba un rehén. La mantuve conmigo porque la deseaba.
Francesca Alessandro soló iba a ser una garantía, un rehén para que su padre supiera que no debía jugar conmigo. Pero intentó desafiarme. Terminó dolorida y empapada cuando le di una lección con el cinturón y después gritando salvajemente cada vez que se corría mientras le enseñaba que debía obedecerme de una forma mucho más vergonzosa.
Ahora es mía. Mía para tenerla conmigo. Mía para protegerla. Mía para utilizarla tan a menudo y tan salvajemente como yo desee.
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