La vida de Amelia no pasa por su mejor momento desde que descubrió que su madre
está enferma, pero eso no le impide hundirse más todavía cuando insulta a su
profesor de la universidad en un atasco, sin saber que es él, lo que no augura
nada bueno.
Sin embargo, el rechazo que pensaba que obtendría por parte del señor Aguirre
no es otra cosa que una atracción irresistible contra la que ninguno es capaz
de luchar.
¿Es correcto desear lo que no se puede tener? ¿Qué pasaría si lo que empezó con
miradas furtivas se convierte en algo más?
Cuando los traumas del pasado de Héctor se hacen presentes y la relación no
parece tener futuro, deberán decidir si siguen adelante a pesar del daño o
poner freno a lo que sienten.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario