El amor de mi vida».
Lady Angelina Raleigh sabía que la época de caza del urogallo rojo traía
visitantes a Goldenshadow Castle, pero ninguno tan esperado como Jace, el hijo
del mejor amigo de su progenitor. ¡Eran inseparables! Hasta que el padre de
ella levantó una muralla entre ambos. «Es varón y tú una dama», fueron las palabras
que usó el conde para poner fin a la unión.
Jason Ayers, futuro duque de Weimar, no lo tomó con serenidad. ¡La quería como
a una hermana menor! Estaban fuera de lugar las insinuaciones del conde. Cuando
Angie recibió varias propuestas tras su primera temporada, el corazón de Jace
latió diferente y la furia lo dominó de pies a cabeza. Tanto amor erosionando
en su pecho, cortado de golpe, fue un tiro de gracia para su ya decadente
existencia.
Si el tiempo cura las heridas del alma, ¿por qué la llaga de su pecho aún
sangra cuando sus destinos vuelven a cruzarse?
Para este hombre enamorado su corazón tiene nombre.
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