Dylan.
Dejo mi prestigioso bufete y me dedico a tejer. Todos mis amigos piensan que
estoy loco, pero la vida es demasiado corta para no hacer exactamente lo que
uno quiere. Por eso, cuando conozco a Natalie, estoy dispuesto a atarla para
siempre.
Natalie.
Ser abogada parecía una forma de hacer el bien en el mundo, pero tratar con
clientes poco fiables y negocios dudosos está acabando con mi idealismo. Quiero
dejarlo, pero no sé adónde ir. Dylan parece tener la cabeza bien amueblada,
pero no puedo caer en sus brazos cuando no estoy segura de mi propio futuro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario