Aiden Stone es un ex marine de un metro ochenta, con el ceño fruncido, cabello
oscuro y ojos azules de ensueño.
Es el mayor de los hermanos Stone, y su familia “de libro” ha luchado contra la
mía por el control de nuestro pequeño pueblo durante generaciones.
Lo último que debería hacer es acostarme con él. O casi atropellarlo con mi
camioneta. Especialmente desde que es algo así como mi nuevo jefe...
No ayuda que mi abuela (la alcaldesa) sea una antigua maga, y que mi madre sea
vidente (más o menos)... Y mi padre murió en un intento fallido de escapismo
(que mi madre está convencida de que fue un asesinato).
Créeme, sé que es una locura, pero no soy más que Britt Bailey, amante de
Shania Twain y fotógrafa forense no mágica. Sí, hago fotos de cosas muertas,
pero no las veo en mi habitación por la noche.
Sólo quiero ver una cosa en mi habitación por la noche, y cuando me llaman a
casa para ayudar al sheriff Stone en una investigación, él deja de fruncir el
ceño por un minuto, y mis fantasías de adolescente se hacen muy reales.
Es una idea terrible. Trabajamos juntos, es siete años mayor que yo, es padre
soltero, odia todas las cosas mágicas, pero un poco de gusto, y no podemos
decir que no.
Hasta que la ola de crímenes de la ciudad se vuelve personal, poniendo todo en
juego, y necesitaremos algo más que una bala mágica para conseguir nuestro
felices para siempre.
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