Pavel Suvorov me salvó de la forma más inesperada.
Pero no es un caballero de brillante armadura. No lo hizo para ayudarme.
Lo hizo para ayudarse a sí mismo conmigo.
Yo necesitaba un salvador. En vez de eso, obtuve un monstruo.
No se parece a nada que me haya encontrado antes.
En la superficie, un sueño. Pero por debajo, una pesadilla viviente.
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