Porque
la vida viene con altibajos que no podemos manejar.. Porque cuando todo parece
ir bien, te emborrachas y ¡Pum!... Despiertas en la cama de tu jefe. ¡Ah no!,
que así no iba la frase.
Con
una vida buena, un trabajo estable y un novio que la adoraba, a María Fernanda
tenía que ocurrirle justo aquello: acostarse con su jefe y encima quedar
embarazada. ¡Pero qué suplicio!
Gonzalo
vive sumido en la oscuridad, torturado por viejos temores, renunciando a toda
posibilidad de amar a alguien una vez más.
Hasta
que una noche, lo dejaron con solo un sujetador debajo de su almohada, nada
menos que su secretaria.
Una
historia, fresca, fácil de leer y llena de amor, que nos deja un gusto dulce,
teniendo por supuesto también, sus momentos de tensión.
Un cúmulo de emociones, dónde no sabes si arrancarles la cabeza a los personajes, o tenerles paciencia y dónde sentirse identificado con ellos es pan comido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario