Ansioso por escapar de un destino peor que la muerte, Sammy viaja de polizón a bordo del Nimble Star, un barco de reparto. Oculta en una caja de maloliente fruta ruru, está segura de que los tallean no pueden detectarla con su agudo sentido del olfato. ¿O pueden?
Criado como huérfano, el capitán Bax no cree en el vínculo
de apareamiento de Tallean. Felices para siempre suena demasiado bueno para ser
verdad. Eso es hasta que conoce a una fugitiva humana pelirroja y fogosa con
una personalidad a la altura. Y para empeorar las cosas, ella pertenece nada
menos que a su viejo enemigo, Soren.
Con los matones de Soren persiguiéndolos,
¿Llegará Nimble Star a su destino de una sola pieza?
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