Cuatro príncipes bestiales. Un torpe ratón de biblioteca. Un mundo encantado de faes, magia y peligro.
Siempre me han gustado los cuentos de hadas. Nunca imaginé que estaría en uno.
Cuando mi padre se adentra en el reino encantado de los faes, sé que tengo que
ir tras él. Y cuando es encarcelado, haré lo que sea para salvarlo... Incluso
cambiar mi libertad por la suya. No tenía ni idea de que acabaría prisionera de
cuatro fae sexys que se convierten en bestias por la noche.
Tengo que ganar mi libertad, y eso significa hacer un trato con ellos. Deben
encontrar a sus compañeras para romper la maldición. Si puedo ayudarles a
hacerlo, me liberarán. Suena simple, ¿verdad?
Pero no lo es. Porque en contra de mi buen juicio, estoy empezando a enamorarme
de estos príncipes bestiales. Uno es inteligente y dulce, el otro misterioso y
mortal, otro coqueto y seguro de sí mismo, y el último príncipe... Es guapo,
fuerte, tiene un carácter malvado y está totalmente en contra de romper la
maldición. ¿Por qué quiere retenerme aquí para siempre?
Pero no sólo está en juego mi libertad. Si no rompo pronto la maldición de los
príncipes, toda la magia del Valle Encantado será robada por el malvado (y
estúpidamente sexy) Príncipe de Espinas. Y no voy a dejar que mis príncipes
sigan malditos.
No después de haberme enamorado de ellos.