La explosión de su pasión les cambiará la suerte para
siempre.
Durante toda su vida Gina Silva ha apuntado a una sola
meta: ser socia mayoritaria en un bufete prestigioso. Los hombres son
distracciones que no permite en su vida, ni siquiera si uno es capaz de hacerla
llorar de la risa y gritar de placer en la misma noche que lo conoció. En lugar
de jamás volverlo a ver, el desgraciado tenía que ser el nuevo cliente
millonario en su bufete, ¿y quién más lo atendería si no la mejor abogada?
Maldita suerte.
Víctor Haumann solo gana en las mesas de póker, en los
negocios y con las mujeres, pero la tragedia y el dolor han ido de la mano de
su éxito. Ninguna cantidad de dinero, mujeres y alcohol había logrado
desaparecer el dolor en su alma hasta que esa feroz y apasionada chica en aquel
bar le hizo olvidar su miseria por una noche. Tenía que verla de nuevo. Y ahora
el destino la puso a ella y a su bufete en su camino. Bendita suerte.
Una demanda los hará trabajar juntos y descubrirán que el hueco dentro de sus almas podrá llenarse con el posible amor entre ellos si logra superar una traición que sacudirá los mundos de ambos.
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