El Colapso lo cambió todo. Los buenos hombres se
convirtieron en asesinos. Las mujeres fuertes se convirtieron en propiedad. Y
cada día se convirtió en una lucha por la supervivencia.
Una vez soñé con ser enfermera. Ese sueño se incendió el mismo día que me
gradué de la escuela de enfermería, cuando a las mujeres se les prohibió tener
cualquier tipo de licencia médica.
Ahora, como médico sin licencia, viajo por lo que alguna vez fue el suroeste de
los Estados Unidos intercambiando servicios médicos por comida, transporte y
refugio con la esperanza de llegar a Canadá.
Porque Estados Unidos ya no existe. Y la tierra sin ley que la reemplazó es un
lugar mortal para una mujer.
Mi peor miedo se hace realidad cuando soy capturada por Steel Demons MC, la
pandilla de moteros más despiadada del suroeste. Estos hombres prosperan con la
violencia y el caos provocados por el Colapso, y están ansiosos por desatarlo
todo sobre mí.
Ni siquiera importa que le guste al perro del presidente. Estoy casi muerta.
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