Para Reyna Carpenter, renunciar a su cuerpo no es una elección.
Es supervivencia.
En una civilización devastada por la pobreza y la desesperación, Reyna acepta un puesto bien remunerado con la élite de vampiros ricos y hambrientos.
Su nuevo trabajo es como la escolta de sangre del intimidante, exigente y endiabladamente guapo Beckham Anderson.
Él es todo lo que ella esperaba de un vampiro, excepto por una cosa: no se alimentará de ella.
Reyna pronto descubre que detrás de la fachada inquietante y perversa de Beckham se esconde un hombre único y complejo. Y que, en un mundo oscuro y dividido, es más valiosa de lo que jamás hubiese creído. Porque con cada noche que pasa, Reyna no puede evitar la sensación de que es Beckham quien le tiene miedo.
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