Mi maestra siempre me dice que el día que me enamore dejaré de ser la prostituta más cara de Venecia y entonces volveré a la miseria. Ella me ha advertido de las mentiras de los hombres poderosos, de la adulación exagerada, de la atracción de los lujos y de la seducción del dinero.
Pero nada de eso me ha servido contra él. Cada noche deja solitarias rosas sobre mi cama. Solo una voz, sus ojos y su rostro, oculto tras una máscara, me han invitado a un juego del que no soy capaz de salir hasta que llegue al final y descubra quién es mientras cuento las noches para volver a verlo.
Su fama eclipsa a la mía, una leyenda que conocen todos. Unos piensan que es un hombre, otros están convencidos de que es un monstruo. Lo llaman… El Fantasma de Venecia.
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